¿Quién sigue? Esa es una buena pregunta, lo que sí está muy claro, es que la detención y encarcelamiento de Guillermo Padrés no es todo, muchos de sus colaboradores, familiares y amigos disfrazados de empresarios también tendrán que explicar señalamientos de corrupción fundamentados por las autoridades.
Son 38 órdenes de aprehensión libradas, también se cuenta con 20 autos de formal prisión, y siguen las investigaciones.
Por supuesto que quienes se sienten acorralados no se han quedado con los brazos cruzados, pues son 225 amparos promovidos por quienes están señalados, también existen 97 amparos más en trámite y 128 amparos sobreseídos, situación que nos dice que no será tan fácil para la autoridad lograr su detención.