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¿Los indecisos tienen la palabra?

 

 

 

 

Columna Andanzas

Por Marcela Alvarado

¿Los indecisos tienen la palabra?

Los candidatos presidenciales tienen ya sólo cuatro semanas para convencer al segmento de los indecisos y lo que se observa es a un José Antonio Meade desbocado y desesperado, a un Ricardo Anaya demagogo, a un Andrés Manuel López Obrador demasiado confiado y a un Jaime Rodríguez queriendo victimizarse.

El abanderado de la coalición PRI-PVEM-PANAL no figura en medios por sus propuestas, sino por su fraseo para tratar de infundir miedo hacia López Obrador y que parece más psicología inversa por el resultado. Baste ver que la tendencia sigue favoreciendo al candidato de Morena-PT-PES.

Nada ha servido para levantar los números de Meade. Ni el relevo en la dirigencia del PRI, a donde llegó un dinosaurio como René Juárez, ni la ‘declaracionitis’ del presidente Enrique Peña Nieto al tratar de contener el hartazgo social y conseguir también lo contrario. Tampoco el proceder del candidato.

Ricardo Anaya ha pasado de copiar algunas promesas de Andrés Manuel, como la de reducir el IVA en la frontera, a caer en excesos. ¿Quién le cree que combatir la pobreza es algo que le apasiona? Por favor.

Y luego utilizó a su madre al decir que ella le enseñó de igualdad, al ser la primera en levantarse y la última en acostarse, lo que refleja una práctica más bien machista, si el papá no hizo lo mismo y no compartió las responsabilidades del hogar.

López Obrador sigue liderando la preferencia electoral y se perfila para ganar tanto la presidencia, al tiempo que su partido y sus aliados la mayoría en el Congreso de la Unión. Pero hacer alarde diciendo que “este arroz ya se coció” suena a soberbia y a extrema confianza, aunque no le falte razón.

Y el “Bronco” ahora la juega de víctima porque el INE turnó el expediente de las irregularidades en el financiamiento de su campaña a la PGR, la Fepade y el SAT. Lo mejor que le podría pasar al proceso electoral es que este fallido candidato renuncie o lo obliguen a hacerlo.

Diversas encuestas que se han dado a conocer en este proceso arrojan un promedio de 25% de indecisos, quienes sin duda influirán en el resultado del 1 de julio, pero falta ver si al grado de inclinar la balanza en forma contundente por alguno de los candidatos o sólo con pequeña variación.

Los equipos de campaña de los candidatos de Morena, PRI, PAN y el “independiente” deberán encontrar una fórmula que les ayude a ser efectivos en sus mensajes hacia este segmento que todavía se inclina por ninguno. Pero no es con demagogia, triunfalismos o con guerra sucia como lo conseguirán.

Hermosillo puede ser para Morena

Encuestas como TM Reporte y Cabildo han dado como resultado números alentadores para Morena en Hermosillo, al ubicarse en segundo lugar después del PRI, con una diferencia de 10.6 y 7.9 puntos, respectivamente, según los levantamientos más recientes que se han conocido, algo inédito para un municipio en el que han gobernado el PRI y el PAN.

La candidata de Morena, la ex panista Célida López tiene dos retos claves, más allá de sus propuestas: convencer de que al cruzar el pantano del gobierno de Guillermo Padrés no se manchó de corrupción y que es capaz de moderar su carácter explosivo. Si logra eso, tiene oportunidad de alcanzar y rebasar.

Hasta el próximo miércoles.

Maestra en Ciencias Sociales con especialidad en Políticas Públicas por El Colegio de Sonora y Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Sonora.

 

Twitter: @AlvaradoVMarce

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