Estados Unidos .- Este viernes, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha tomado medidas firmes para abordar la inmigración irregular en el estado, firmando tres proyectos de ley diseñados para tal fin.
En una rueda de prensa, DeSantis anunció el despliegue de más de 250 unidades estatales al sur del estado y los cayos para reforzar la frontera. Desde enero del año pasado, las fuerzas estatales en colaboración con la Guardia Costera, detuvieron 670 embarcaciones con aproximadamente 13,500 “inmigrantes ilegales” a bordo.
El gobernador destacó la capacidad para detener a los migrantes en el mar y la intención de “devolverlos” antes de que logren desembarcar en tierra estadounidense, como parte de la estrategia para frenar la irregularidad.
Críticas y aumento de sanciones
Sin embargo, las medidas impuestas han sido criticadas por organizaciones civiles del sur de Florida, particularmente por la comunidad haitiana, la más grande en Estados Unidos. La nación caribeña ha exigido una respuesta más compasiva ante la crisis en Haití en lugar de una “militarización” de la frontera.
El gobernador también rubricó tres proyectos de ley para interceptar a los inmigrantes, uno de estos prohíbe a los gobiernos locales aceptar tarjetas comunitarias como documentos de identidad.
Otro proyecto, el HB 1589, aumenta las sanciones por conducir sin licencia válida, estableciendo penas de al menos diez días de cárcel para los reincidentes, con el objetivo de disuadir la inmigración ilegal en el estado.
Por último, el SB 1036 incrementa las penas para aquellos individuos que hayan sido deportados y tengan registrados delitos, así como para aquellos que brinden apoyo a los cárteles de la droga.
Fuente/Reportero: El Imparcial