Redacción .- El presidente ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun, ofreció disculpas y reconoció las deficiencias del fabricante de aviones durante una audiencia ante el Subcomité Permanente de Investigaciones del Senado de Estados Unidos.
Calhoun expresó su pesar hacia las familias afectadas por los accidentes del 737 MAX y admitió que la emergencia ocurrida en enero, involucrando a un 737 MAX 9, subrayó preocupaciones sobre la seguridad de la compañía.
“Me hago esa pregunta todos los días, ¿hemos hecho lo suficiente?”, afirmó Calhoun al responder preguntas durante la sesión, siendo esta la primera vez que se enfrenta a los legisladores.
La audiencia destacó la reputación deteriorada de Boeing en seguridad y la futura salida de Calhoun de la presidencia ejecutiva a finales de año, como parte de una reorganización directiva.
Calhoun admitió que Boeing asumió la responsabilidad por el desarrollo de un sistema de software clave relacionado con los accidentes mortales en Indonesia y Etiopía en 2018 y 2019, que resultaron en la pérdida de 346 vidas humanas.
— Estoy aquí en el espíritu de la transparencia y estoy aquí para asumir la responsabilidad”, declaró Calhoun a los periodistas antes de la audiencia.
Político critica a Boeing
El senador Richard Blumenthal, presidiendo el subcomité, sugirió que existen pruebas contundentes para que el Departamento de Justicia de EU tome acciones legales contra Boeing, especialmente tras determinar que la compañía no cumplió adecuadamente con un acuerdo de procesamiento diferido relacionado con los accidentes anteriores.
Blumenthal criticó la cultura corporativa de Boeing, acusándola de priorizar las ganancias sobre la seguridad y el bienestar de los trabajadores. Además, mencionó que un nuevo denunciante se presentó con preocupaciones sobre prácticas de calidad en la producción de Boeing.
La audiencia subrayó los esfuerzos de Boeing por abordar las críticas sobre su seguridad y ética empresarial, mientras enfrenta presiones regulatorias y legales significativas.
Fuente/Reportero: Martín Álvarez & Reuters