Hasta ahora se ha logrado una Semana Santa blanca, pero no excenta de accidentes. Pero todavía se puede lograr que cierren estas vacaciones sin víctimas y sin funerales. Lo único que hay que hacer es poner cuidado. Manejar con precaución. No ir viendo celular o tomando. Ir a la velocidad permitida. Todos con cinturón de seguridad. Que el carro esté bien checado, sobre todo las llantas. Y así podamos regresar para platicar lo bien que nos fue en las vacaciones. Recuerden, el chiste no es solo ir, sino saber regresar.