Todo parece indicar que la estructura electoral estatal ya tiene dueño y despachan en palacio de gobierno. Para nadie es secreto de que el Instituto Estatal Electoral está bajo control de Morena y la 4T. Pero ahora lograron la enchilada completa al imponer nuevo presidente del Tribunal Estatal Electoral con el magistrado Vladimir Gómez, cuya familia milita en Morena y cobran en la administración estatal. Esto no es nuevo, ni exclusivo de este gobierno. Siempre se ha hecho, pero la oposición pegaba de gritos. Hoy lo raro es que callan como momias.