Caray, ya solo queda un año para las elecciones presidenciales. A estas alturas el oficialismo anda alocado con tanta corcholata que se promueven por todo el país gastando millones de pesos. En cambio la oposición sigue durmiendo la siesta. Más preocupado por el método de selección, que por elegir al adecuado. No es por echar la sal, pero esto está más cuesta arriba que un juego de los Yanquis de Nueva York contra la banca de los Naranjeros. Así de jodido el asunto….Por lo pronto, claro.
