Este lunes se cumplirán cuatro semanas de huelga en la Universidad de Sonora, porque el STEUS sigue amachado en rechazar todas las propuestas de Rectoría. Lo grave de todo esto es que están invertidas las prioridades en este caso. Lo más importante en una universidad son los estudiantes y luego vienen las de trabajadores y maestros. Sin embargo, pareciera que los estudiantes no cuentan y no importan. Como que ya es tiempo de legislar para evitar estos daños. No se vale que las minorías estén sobre las enormes mayorías que son los jóvenes estudiantes.