En Coahuila el ofialismo está haciendo aguas y en su desesperación intentaron bajar a los candidatos a gobernador del PT y del Verde, pero nanay. Los candidatos no se doblaron. Aquí se muestra la desesperación de Morena y de Mario Delegado. Seguramente sabe que si pierde puede perder, a lo mejor no la cabeza, pero si la confianza de su jefe el presidente. Por lo pronto hay algo que solo en México sucede. El PT y el Verde apoyarán al candidato de Morena y no a su propio candidato. Esto en cualquier parte del mundo es una cochinada.
