El gobierno de la 4T de Campeche sigue mostrando el cobre. Ahora su rostro represivo al ordenar desmantelar una pequeña capilla de oración dentro de un hospital estatal, solo porque grupos católicos no se plegaron a los caprichos de Layda Sansores. Esto para que vean lo que viene en caso de que tomen el control total. Sobre aviso.